in

Acuerdo entre BSC e IBM para desarrollar chips con tecnología europea

Acuerdo entre BSC e IBM para desarrollar chips con tecnología europea

El Barcelona Supercomputing Center (BSC), sede del superordenador MareNostrum, e IBM han anunciado una iniciativa denominada «Future of Computing» para desarrollar chips de alto rendimiento con tecnología europea. El objetivo es conseguir nuevos procesadores que resulten más eficientes con un menor consumo energético, lo que contribuirá a reducirá la dependencia tecnológica de la Unión Europea frente a las compañías norteamericanas y asiáticas, que dominará este mercado.

Una de las partes del acuerdo incluye una inversión de IBM de 3 millones de euros en becas destinadas a la educación y la investigación. Los nuevos procesadores estarán diseñados con el estándar de código abierto RISC-V y se utilizarán principalmente para lo que se denomina computación de alto rendimiento (HPC por sus siglas en inglés). El acuerdo ha sido firmado por el director del BSC, Mateo Valero, y por el presidente de IBM España, Portugal, Grecia e Israel, Horacio Morell, en la cumbre RISC-V que reúne a las universidades españolas en Barcelona.

La Vanguardia ha podido hablar en detalle sobre este acuerdo con Mateo Valero y con Alberto García, ingeniero jefe de la comunidad Quantum de IBM. El director del BSC explica que, en la industria de los chips, “lo que hay ahora son los dueños del juego de la distribución, como Intel, AMD y Nvidia. La competencia es entre esos pocos, entonces hay pocas posibilidades de competir. Ahora , curiosamente, se fundamentan unas reglas de que la cosa va a ser abierta -el estándar abierto RISC-V-, con lo que va a haber mucha más competencia que lo va a mejorar todo».

Alberto García (IBM): «Abrir el mercado del chip va a permitir más competitividad, reducir el precio de los chips, Availability, y la soberanía tecnologia de Europa»

Alberto García secunda esta apreciación y señala que «IBM tiene mucha voluntad de apoyar tecnologías europeas que se generen aquí». «RISC-V -observa- es un estándar abierto que va a permitir que no sólo las compañías propietarias hagan chips, sino que cualquiera pueda acceder. Abrir el mercado del chip va a permitir más competitividad, va a permitir reducir el precio de los chips, que haya muchísima disponibilidad, y va permitir la soberanía tecnología de Europa».

Mateo Valero asegura que IBM «siempre ha intentado crear riqueza aquí. En este caso concreto, están ayudando a que Barcelona, ​​Catalunya y España, realente creen puestos de trabajo de alta calidad». Paralelamente, el BSC está coordinando a todas las universidades españolas para impartir RISC-V. «Esto nunca ha pasado en la universidad española: preparer chicas y chicos que realente cambien el mundo -comenta el director del BSC-«. «Los chips son los que dominan el mundo y ahora va a haber posibilidad de hacer muchos chips, optimizados para ciertas cosas, y que ingenieros e ingenieras españoles tengan aquí trabajo tan buenos como el extranjero. Es otra parte del acuerdo, que van ayudar a todo esto y estoy muy contento», manifiesta.

¿Para que van a servir esos nuevos chips? Valero clara que «los chips que llevan los superordenadores son los más rápidos del mundo, pero a su vez sirven para otras cosas». Entre ellas, la inteligencia artificial, que ha explotado al introducirla en supercomputadores, pero también en usos como los de los autonomos coches. El director del BSC advierte que el trabajo no está sólo en los propios procesadores, porque uno de los objetivos es que tengan «un software no asociado» para conseguir el mínimo consumo posible. «De nada te sirve para hacer un rascacielos de 300 pisos si luego la gente no entra. Tiene que ser un codiseño. Eso lo aprendimos de IBM», sentencia.

Mateo Valero (BSC): “Quienes producen riqueza son las empresas y todo lo que podamos hacer por los centros de investigación para ellas es nuestra obligación”

El resultado de la investigación tendrá un traslado a la industria. Alberto García señala que el objetivo de esta investigación es «no es sólo el desarrollo de talento local, sino también transpasar todo lo que podemos investigador hacia la industria, porque ese enlace entre las entidades de investigación y la industria a veces se queda un poco perdida». Mateo Valero secundó: «creemos que quienes producen riqueza en un país son las empresas y todo lo que podamos hacer con los centros de investigación para ellas es nuestra obligación como investigadores. Investigar consiste en ayudar a crear puestos de trabajo en España, o Barcelona».

IBM y el BSC mantienen una colaboración desde el principio. De hecho, la compañía tecnologia estuvo en el origen de esta entidad. “Sin muchas cosas que confluyeron, pero sin IBM, que fue importante, el BSC no existiría”, afirmó Mateo Valero. “El BSC fue la continuación de una idea que tuvimos en el año 1985 con el ministro Joan Majó, de crear en la Politécnica un centro de ordenadores paralelos que llamamos Centro Europeo de Paralelismo de Barcelona (CEPBA)”, relata.

Diez años más tarde, con la participación de IBM y los gobiernos de España, Cataluña y la UPC, se creó un centro mixto llamado CIRI (CEPBA-IBM Research Institute), lo que ayudó es que IBM puso en ese momento una máquina de precios, que era 12 millones”, indicó Mateo. Con ella «se probaron nuevas tecnologías. Fue el primer supercomputador commodities en el sentido de que el hardware era el del PowerPC y el software era Linux». «Esa combinación -señala- no se había dado nunca y resulta que montamos de repente el cuarto supercomputador del mundo. Ese es el origen del BSC y de cómo contactamos a IBM como hicimos del 2000 al 2004 este centro, que sin ellos, no habría existido».

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

South Summit cierra su edición con 6.500 empresas emergentes de 120 países

South Summit cierra su edición con 6.500 empresas emergentes de 120 países

Innovar en las Empresas: No basta con decidir

Innovar en las Empresas: No basta con decidir