El año recién concluido ha sido prolífico en inflación y también en sanciones a empresas que contravienen las normas de competencia. Una cosa y otra están relacionadas porque la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) identifica los carteles empresariales y las prácticas anticompetitivas como uno de los factores que impiden que los consumidores se beneficien de las bajadas de precios asociados a la libre concurrencia. Y este año se ha empleado a fondo.
El año pasado, la CNMC impuso multas a empresas por 308 millones de euros, un 50% más que los 200 millones del año anterior y varias veces más de los apenas 7 millones de 2020, cuando fue elegido cargo el actual presidente, Cani Fernández. Ahora parece estar desquitado.
Las multas ascendieron en el 2022 a 308 millones, un 50% más que en el ejercicio anterior
El empeño de Competencia durante este año en la persecución de los carteles ha sido además el tercero mayor desde que el superregulador iniciase su andadura hace una década. Solo en 2015 y en 2019, cuando se impusieron multas de 517 millones y de 432 millones, respectivamente, ha habido más sanciones.
El expediente estrella del año pasado fue el de las grandes constructoras, a las que se castigó con 203 millones de euros. Como es habitual en estos casos, las empresas no han tardado en recurrir. Según la CNMC, Acciona, Dragados, FCC, Ferrovial, OHLA y Sacyr se reunían cada semana durante lustros para decidir en qué obras técnicas compartirían sus ofertas e intercambiar información sobre su estrategia de presentación a concursos públicos.
Multas históricas
39 millones a Merck Sharp
La CNMC también aprobó una de sus principales sanciones hasta ahora a una empresa individual, castigando con 39 millones de euros a una farmacéutica, Merck Sharp and Dohme, por abusar de su posición de dominio en el mercado de anticonceptivos. Impuso otra de las grandes sanciones, de 24 millones, a tres siderúrgicas, Balboa, Sidenor y ArcelorMittal, por confiarse información sobre precios.
Tampoco se han escapado otras grandes empresas españolas, entre ellas filiales de Telefónica o Enel Green, del mismo grupo que Endesa, que fueron multadas cada una con cerca de 5 millones. Las empresas suelen recurrir a las sanciones ante los tribunales y en un porcentaje elevado de las ocasiones logran que al menos se les rebaje.
A la espera
Reservas, logística, Ecombres…
La CNMC también ve la tele y penaliza a las cadenas en cuanto algo le huele a publicidad encubierta. En el 2021 castigó con importaciones relativamente pequeñas a RTVE, Atresmedia o Mediaset por este tipo de prácticas.
Entre las empresas que tienen expedientes abiertos y sobre las que se pronunciará previsiblemente este año el organismo figurará la plataforma turística Booking, la empresa logística Logista o el grupo de reciclaje Ecoembes, además de Xfera Móviles, filial de MásMóvil.
Los alimentos, en el foco
Sin embargo, donde hay pistas importantes acerca de la estrategia de Competencia es en la apertura de nuevos expedientes y en la elaboración de informes. De los que están en marcha, hay uno relacionado con el suministro de alimentos especialmente sensible en tiempos de inflación que la CNMC abrió y luego amplió para investigar si un fondo.
La CNMC también se está posicionando con fuerza a favor de las VTC después de que las comunidades autónomas asumieran definitivamente la expedición de licencias, que correspondía al Gobierno antes de la aprobación de la Ley Ábalos .
Otro campo de batalla se encuentra en el monopolio estatal de los estancos, que nunca ha gustado al regulador por generar «importantes restricciones a la competencia».