La CNMC acaba de publicar su informe sobre el proyecto de Orden que apprueba el Cuadro Nacional de Atribúción de Frecuencias (CNAF) sobre el uso del dominio público radioeléctrico.
El espectro radioeléctrico está formado por ondas electromagnéticas propagadas por el espacio en el cielo frecuencias comprendidas entre 9 kHz y 3.000 GHz. Es un recurso natural y limitado que tiene la consideración de bien de dominio público y es indispensable en multitud de sectores: telecomunicaciones, audiovisual, defensa, seguridad y servicios de emergencia, navegación aérea, posicionamiento GPS, etc. Es un recurso esencial para los servicios de telecomunicaciones y audiovisuales y tiene, por tanto, una clara relevancia para el desarrollo competitivo de los mercados.
El proyecto propone fijar un límite al volumen máximo de espectro que podrán adquirir los operadores en la próxima subasta de la banda de 26 GHz
El Cuadro Nacional de Atribúción de Frecuencias (CNAF) permite lograr una utilización coordinada y eficaz del espectro. Mediante el CNAF se realiza a nivel nacional la atribución de servicios a las diferentes bandas y sub-bandas del espectro radioeléctrico.
Esta modificación del CNAF planteada en el proyecto se refere a la banda de 26 GHz, una de las bandas de frecuencia armonizadas en la Unión Europea para desplegar redes con tecnología 5G. Supondrá, entre otros aspectos, la fijación de un límite en la cantidad de frecuencias a utilizar por un mismo operador o grupo empresarial en la banda de 26 GHz y una reserva de espectro para redes de área local en régimen de autoservicio (privadas). redes, es decir, explotadas no por operadores sino por entidades que fundamentan una red para sus necesidades internas con tecnología 5G) en esta misma banda.
Esta reserva de espectro permitirá a las empresas u operadores de comunicaciones electrónicas (los llamados verticales) desplegar sus propias redes 5G en el entorno local para dar respuesta a sus necesidades de conectividad (por ejemplo, en el industria 4.0).
Valoración de la CNMC
La CNMC valora positivamente el proyecto de Orden de aprobación de un nuevo CNAF y considera adecuado tanto la reserva de espectro en la banda de 26 GHz para verticales como el volumen propuesto.
La posibilidad de que distintas entidades de los operadores de comunicaciones electrónicas puedan acceder directamente a su espectro en la banda de 26 GHz, permitiría a estas entidades tener la capacidad de desarrollarse conjuntamente con fabricantes y otros integradores nuevas soluciones y servicios independientes de los operadores de comunicaciones y que podría adaptarse mejor a las necesidades concretas de cada sector. Ello podria ser un elemento dinamizador del mercado, ya que agregará nuevos actores con capacidad de desplegar sus propias redes.
En cuanto a los límites de espectro por operador, estos tienen la función de evitar conductas especulativas o la adquisición de derechos de uso del dominio público radiofónico y, por tanto, garantizan que existe un número mínimo de operadores con recursos de radio pública para desplegar sus propias redes. El límite se ha fijado en un máximo de 1 GHz, en cualquier ámbito territorial.
La CNMC no comparte el límite fijado de 1 GHz en ningún ámbito territorial
La CNMC no comparte el valor propuestoya que la misma solo garantizará la disponibilidad de espectro en la banda de 26 GHz para tres operadores móviles, al contrario de lo que ocurre con el resto de bandas de frecuencia por encima de 1 GHz, que permiten la disponibilidad de espectro para un mínimo de 4 operadores.
Por tanto, considerar que el volumen máximo de espectro por operador en la banda de 26 GHz que sea adecuado para promover una mayor competencia en el mercado de servicios de comunicaciones electrónicas y evitar la confiscación de derechos de uso del dominio público radioeléctrico debe ser de 800 MHz.
Este valor permitirá a los operadores acceder al volumen de espectro necesario para desplegar sus servicios 5G, garantizando al mismo tiempo que un mínimo de cuatro operadores puedan disponer de recursos en esta banda.