La pandemia de covid ha supuesto un resurgimiento que precedió en el ámbito de la salud digital, acelerando la implantación de nuevas tecnologías que ya han cambiado nuestra manera de entender la atención médica y sanitaria. De hecho, es innegable que el uso de estas herramientas y de la telemedicina durante los peores momentos de la pandemia trajo consecuencias positivas. Así an analizaron diversos expertos en la primera edición del ciclo “The eHealth What If Forum”, organizado a finales de 2021 por el eHealth Centre de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), que destacaron cómo la atención telemática evitó que el sistema sanitario colapsara en un momento de máxima presión. También coincidieron en que la digitalización ayudó a acelerar muchos procesos sanitarios, e hizo evidente que se logró gestionar y analizar de manera óptima grandes cantidades de datos generados por los pacientes. Un tema que desea debitar de esto es: el valor del big data en el sector médico.
Los expertos están constantemente reconciliando aspectos de mejorar, como el hecho de que algunas aplicaciones, como las desarrolladas para el rastreo de contactos, no demostraron ser realmente útiles. Y señaló que algunos pacientes percibieron la digitalización como una sustitución no deseada y de menos calidad que la atención presencial. Una percepción que desmintió defendiendo que una salud digital bien desarrollada no implica una deshumanización de la sanidad, si no que supone un complemento y permite dedicar más tiempo a quien más lo necesita. Ante este caldo de cultivo, y en un momento en que la pandemia empieza a dar tregua, es lógico preguntarse en qué punto se encuentra la relación entre tecnología y salud.
Tecnologías que suman
La computación en la nube, la inteligencia artificial, el 5G y el IoT permiten a los hospitales y los sistemas de salud abordar los desafíos actuales y futuros
Según datos de la consultora Global Market Insights, el mercado mundial de salud digital estaba valorado en más de 200.000 millones de dólares estadounidenses en 2020, y se espera que la cifra supere los 600.000 millones de dólares para 2027. Y es que, como también apunta la consultora Deloitte en su informe “2022 Global Health Care Outlook. ¿Estamos viendo finalmente la transformación tan prometida?”, A pandemia se le suma un contexto de grandes avances médicos; una explosión de tecnologías digitales; el acceso a datos ya su análisis; pacifistas informados y empoderados; y una tendencia que aboga por el autocuidado, la prevención y el bienestar, que catalizará todavía más esta transformación del mundo de la salud. De hecho, el mismo informe ya recoge que actualmente los hospitales y los sistemas de salud están recurriendo a la computación en la nube, a las telecomunicaciones 5G, a la inteligencia artificial y al internet de las cosas (IoT) para abordar los desafíos actuales y también crear nuevos modelos de atención médica prestación.
La transformación se encuentra en el contexto de exploraciones de medios digitales a gran escala, explosiones de tecnología digital, análisis de datos y paquetes más informativos.
Son tecnólogos que en la primera mitad del año están mucho más presentes y presentes, han podido instaurar un nuevo modelo de médico-pacifismo, permitiendo ser más ágiles en la prevención y detección de cedales enfermedades o en la semiótica. . Dos aspectos que, precisamente, la pandemia y la saturación del sistema sanitario, ha obligado a dejar en un segundo plano. La inteligencia artificial, por ejemplo, permite analizar y analgesiar el diagnóstico; y, combinado con la realidad aumentada, mejorará la seguridad de los enfermos en las explosiones. Asimismo, el uso integrado de paquetes de datos, big data, también transformará la forma de diagnóstico, permitirá la
La brecha digital y su impacto entre los chupetes de edad
Si bien la salud digital se erige ya como una realidad, presente y futura, entidades como el Foro Español de Pacientes recuerdan que las personas mayores -casi 10 millones en España tienen más de 65 años- siguen teniendo problemas para acceder a ella. “Han perdido la forma de acceso a la sanidad que utilizaban habitualmente, el teléfono en virtud de la cita por aplicación móvil o web; la calidad de comunicación con su profesional sanitario, al pasar de las citas presenciales a la telemedicina; y su acceso a la información ha quedado limitado al reducirse la entrega de información en papel y estar toda la información en Internet”, afirmaban recientemente. Todo esto, añadían, los convierte en personas más dependientes. Piden alternativas para el acceso al sistema sanitario para mayores que viven en zonas rurales con baja conectividad o formación básica para mayores sobre internet y salud, entre otras demandas.
la personalización del tratamiento, la identificación de factores de factoring verificados y el posible establecimiento de eficiencias de valores médicos, y los resultados y resultados del sector salud en general. Lo apuntó Deloitte en otro artículo titulado “La aceleración de la digitalización en salud. Cinco predicciones sobre el sector salud para 2025”.
Romper la brecha digital y ofrecer competencias tecnológicas al personal sanitario es clave para consolidar los nuevos modelos de salud digital
Entre esas cinco predicciones se menciona que el hogar será el lugar habitual para el cuidado y el seguimiento rutinario de la salud. En este sentido, Neil Batra, uno de los expertos que ha ayudado en el informe “2022 Global Health Care Outlook”, también prevé la utilización de tecnologías digitales para “construir, dotar de personal y equipar un ‘hospital sin paredes’ que combine la atención hospitalaria con modelos alternativos, incluida la atención comunitaria y domiciliaria”. Y añade: “En el futuro, los pacientes y sus familias asumirán la responsabilidad de una gran parte de su atención médica; y van a necesitar herramientas digitales avanzadas que les permitan hacerlo”.
Uso inteligente de los datos
El big data transforma el manual de diagnóstico y permite la personalización de los usuarios
Estima estar facultado y tener una mayor autonomía, así como empaquetar así como personal sanitario, al margen de las tendencias que se vislumbran en el sector. Y entronca con otra de las cinco predicciones avanzadas por Deloitte: los hospitales estarán reservados para tratamientos especializados, traumatologías y emergencias. El resto de los lectores avanzan que muchos de los contactos empaquetados en medios se realizan en realidad virtual; que más del 70% de los españoles realizaron sus consultas por vídeo llamada; y que los pacientes estarán mejor informados sobre su perfil genético, su salud actual y las gallules enfermedades futuras.
‘WEARABLES’: SALUD PORTÁTIL
La consultora también establece en su informe “Predicciones TMT 2022” que los smartwatches (relojes inteligentes) y los dispositivos médicos wearable ayudan a que los pacientes monitoricen su salud en todo momento, no solo cuando hagan deporte. Con funcionalidades que van más allá de medir el ritmo cardíaco y contar los pasos, y que permitirán controlar aspectos como la temperatura corporal, la fibrilación auricular, la oxigenación de la sangre, la presión arterial o los niveles de azúcar. Estos son desechables, en los que también se encuentran las tiritas adhesivas, los teléfonos inteligentes conectados a aplicaciones o los biosensores, serán de gran ayuda para hacer frente a la saturación del sistema sanitario, el envejecimiento de la granursión quen inversión las enfermedades crónicas. Antes, pero, tienen que pasar varios escollos: ganarse la confianza del sector médico, escéptico en cuanto a su utilidad y exactitud, y dar respuesta a las inquietudes relativas a la privacidad, la seguridad y la protección de los datos de sus usuarios. Algo que también se traslada al resto de tecnologías vinculadas a la nueva salud digital. Aún así, se prevé que la venta de estos dispositivos sanitarios de gran consumo y de los wearables destinados al bienestar aumente hasta más de 320 millones de unidades en 2022.
CAMBANDO LA FORMACION
Pero, tal y como se abordó en el ciclo “The eHealth What If Forum” de la UOC, la transformación digital del sector no es solo una cuestión de tecnología, si no que también es un tema de personas, “de profesionales y ciudadanos, e implica un cambio cultural y organizativo”, según señalado Albert Barberà, director del eHealth Centre de la UOC. Las lenguas expertas coincidieron en que se han desarrollado productos y tecnológicamente sólidos y acelerados, que se ajustan a las necesidades específicas de los pacientes. Sin olvidar asuntos como la brecha digital, que puede suponer un gran riesgo si se acaban excluyendo a los pacientes más mayores. Otro aspecto prioritario tiene que ser la formación continua, y en muchos casos especializados, de todos los profesionales sanitarios en el uso de estas tecnologías, ayudándoles a desarrollar sus competencias digitales y proporcionándoles los recursos necesarios para que no sientan un quea no sientan sobrecarga de trabajo añadida.
El paquete es autocontrolado.
El valor de los wearables destinados a la bienal y el monitor de los auxiliares de salud supera los 320 millones de unidades en 2022
Tras esta primera oleada tecnológica derivada de la pandemia de la covid es acertado afirmar que se están dando buenos pasos. Los técnicos garantizan una mayor eficacia y más seguridad sistémica, y favorece que los cítricos sanitarios lleguen a muchas más personas. Pero para transformar el modelo hay que seguir trabajando en los próximos años. Es una cola que consume mucho tiempo y que puede utilizar para la salud y los sistemas sanitarios digitales, pero también para la telemedicina internacional, que puede cambiar sustancialmente. Como dicen los expertos, si bien el desafío es enorme, también lo es la oportunidad que tenemos.
La Meva Salut: 5 millones de usuarios
La Meva Salut (LMS) es la plataforma digital que permea a la ciudadanía acentuada en directo, sin rodeos, y a los profesionales de la Primaria Atención Cataluña, así como una información médica personal: resultados de pruebas, informes y diagnósticos clínicos, plan médico , certificación digital de vacante, recibos, etc. La pandemia de la covid ha acelerado la utilización de esta herramienta y ha disparado exponencialmente su número de usuarios. Si bienal en 2019 LMS contaba con unas 600.000 personas registradas, la cifra roza ahora los 5.300.000 usuarios, según datos facilitados, a principios de febrero, por el Departamento de Salud de la Generalitat. Esto significa que el número de usuarios se multiplica por 5,3 respecto a antes de la covid. Esta aceleración se debe, en parte, a algunas de las funcionalidades que la plataforma ha implementado para dar respuesta a las necesidades derivadas de la pandemia: la visualización de los resultados de PCR y de test de impresión, la tramitación de la baja laboral o la obtención del certificado digital europeo de vacunación. Pero también ha jugado un papel destacado la eConsulta, que permite enviar mensajes a los profesionales sanitarios de referencia, y que utilizan más de dos millones de personas. Así como, más recientemente, una nueva función para conectarse con el administrador personal, disponer de tranvías y documentos. Todas las personas que puedan sacar la tarjeta sanitaria pueden acceder a un LMS desde Lamevasalut.gencat.cat o desde tu app.